domingo, 28 de noviembre de 2010

Elección Capítulo 19

Margot estaba sentada en un banco a unos pasos de nosotros. Cuando me vio se levantó para irnos hacia el coche.
-¿Estás bien Allison?
-Sí- dije con la voz ronca, estaba a punto de echarme a llorar.
-¿No te iras a poner a llorar ahora? Creo que no ha sido buena idea que vinieras.
-No voy a llorar. Tenía que venir, no podía quedarme allí de brazos cruzados.- dije mientras me metía en el asiento del copiloto del coche.
-Allison, estas apunto de derrumbarte, si no lo hubiera traído…
-Ahora estaría peor, es solo por dejarle ir otra vez, tiene un montón de pretendientes, el primer día que vino, todas estaban detrás de él, me parece muy irreal que sea yo la afortunada de tan inmenso grupo, pero no he querido mencionarle nada, bastante tiene con estar preocupado por Alan.
-Él te quiere a ti, no te cambiaría por nada, no te preocupes por el tema. Seguramente si se lo hubieras mencionado hubierais acabado cabreados antes de que acabase la semana, has hecho bien.
-Si que me tengo que preocupar, le dije que no estuviera celoso cuando a mi me es imposible no estarlo. Emily se quedó alucinada cuando le vio por primera vez, y ahora ella también es vampira y está más cerca de él de lo que puedo estarlo yo.
-Enserio Allison, no tienes motivos para estar celosa, pronto volveréis a veros ya verás.
-Las relaciones a distancia son muy complicadas, se ve que no lo entiendes, claro tú puedes ver a tu novio cuando quieras, normal que no lo entiendas.
-¿Y eso significa que no puedo sentir celos? Allison aquí también hay más chicas detrás de Marcos, chicas que no son sus enemigas naturales, chicas que pueden estar con él sin transformarse en una loba.
-Pero… tú no te has transformado nunca cuando has estado con él.
-Porque no e perdido el control, si lo llego a perder, durante un momento…no quiero ni pensarlo. Así que sí, se lo que es una relación complicada, se lo que es sentir celos, no puedes decir que no te comprendo.
-Aún así, tu lo tienes hay, lo ves todos los días, a todas horas. Yo no.
-Ya encontraremos la forma.
-La única forma es volviendo a nuestra antigua casa, esto fue un error y lo sabes.
-Pensé que no volveríamos ha hablar sobre el tema.
-Pues te equivocabas, no puedo pedirle que coja aviones cada dos por tres para venir a verme, no puedo es mucho dinero, yo también tengo que poner de mi parte. Tenemos una casa allí, pero claro, es más fácil que nos quedemos en nuestra nueva casa y tú puedas estar con Marcos, así la única perjudicada soy yo.
-Prefiero que llores antes que lo conviertas en rabia.
-No lo estoy convirtiendo en rabia, es lo que siento. Margot es que no puedo más. La única perjudicada aquí soy yo.
-Eso no es verdad.
-¿A no? ¿Que has perdido tú?- pero Margot no contestaba.-Ves llevaba razón. Le he vuelto a dejar ir, otra vez.- Y hay si que me puse a llorar. Todo esto era demasiado para mi.
Margot dejó que me desahogara el resto del camino mientras ella permanecía en silencio, cosa que era un consuelo. Quizás lo único que estaba pensando era en lo que había perdido ella, cuya respuesta se reducía a nada. Ella con este cambio había ganado más que perdido. Aparcó el coche, subí a mi habitación y me tumbé en la cama. No se cuanto tiempo estuve allí mirando al techo, pero pasado un rato Margot entró con una bandeja de comida.
-Te traigo la cena.
-No tengo hambre.
-Tienes que comer, te lo dejo aquí.
En cuanto se marchó me puse el pijama y me fui a dormir sin probar bocado. Aquella noche soñé con Dylan, que volvíamos a estar juntos. Pero claro, aquello eran solo sueños, y en cuanto desperté volví a la realidad. Esa mañana desayuné poco y me fui al instituto.
-¿Ya se ha ido Dylan?- me preguntó Olivia a primera hora.
-Sí.
-Se nota. Parece que de un momento a otro te vas a caer.
-Estoy bien.
Y esta semana se convirtió en la peor semana de toda mi vida. Hablaba con las chicas y un par de días quedé con Alan. Dylan me llamaba todas las tardes, cuando le mencionaba a Alan intentaba usar el mismo tono de voz, pero no lo conseguía. Por eso intentaba no decirle nada sobre el tema. Al final de la semana me acabé conformando con las llamadas, y llegaba a casa ilusionada para hablar con él. Olivia montó una fiesta de pijamas con el único fin de alegrarme, cosa que consiguió un poco. También me puse a buscar trabajo para ayudar a pagar el alquiler de la casa y comer.
El lunes de la semana siguiente, llegando a casa del instituto, recibí una llamada en la que me daban trabajo en la cafetería.
-Hola, soy Allison la nueva empleada.-le dije a la camarera más cercana que había.
-Vale, espero aquí, voy a avisar al encargado.- al cabo de unos minutos vino con un chico alto, tremendamente parecido a Alan. El chico dijo llamarse Diego, me dijo algunas normas que debería cumplir, mi sueldo y cuanto trabajaría, lo que me dejaría las tardes totalmente ocupadas. Era la camarera, para un primer día la estaba pifiando bastante, casi se me cae la bandeja en dos ocasiones, llevé varios pedidos a mesas equivocadas…Vamos lo que una novata hace su primer día, todo mal.
-Tranquila, mañana seguro que se te da todo esto mejor, es solo tu primer día.- me dijo Emma, la camarera que había conocido al llegar allí. Al parecer ella vivía sola allí, y como yo, trabajaba para pagar el alquiler. Ella misma decía que este era un trabajo fácil en el que te pagaban bien.
-Eso espero.
-Seguro que si- dijo Diego acercándose a mi- Oye, tengo una duda desde que has llegado aquí, mi hermano no para de hablar de una tal Allison, que es nueva aquí, ¿por casualidad no serás tú?- ahora era cuando me encajaba el parecido que le encontré al principio.
-¿Tu hermano es Alan?
-Exacto, ¿eso quiere decir un si?
-Si, soy yo.
-No para de hablarme de ti, apuesto lo que quieras que en cuanto sepa que trabajas aquí vendrá todos los días a que le sirvas.-esto me hizo ruborizarme de la vergüenza, al parecer todos estaban convencidos que estaba coladito por mi.
-Bueno yo me voy a casa ya, mi hermana me estará esperando.
-¡Hasta mañana!
-¡Hasta mañana!
Ya se había hecho de noche, y el camino a casa me resultaba más difícil de recorrer por la calle escasamente iluminada por la que solía andar. Oía ruidos a mí espalada, y miraba hacia atrás de vez en cuando por temor a que me pudiera pasar algo, pero nunca veía a nadie, así que pensé que solo eran imaginaciones mías.
-¿Qué tal tu primer día de trabajo?- dijo Margot en cuanto entré en casa.
-Fatal. ¿Tú todavía no has encontrado nada?
-No, nada, espero que con tu sueldo nos baste.
-Papá y mamá nos mandan dinero cada mes ¿no?
-Sí, pero no nos da para todo, por eso necesitamos el trabajo. Te he dejado un trozo de pizza en el microondas para que la calientes, debes de tener hambre.
-No mucha, pero tranquila, me lo comeré.
Fui a la cocina, me comí la pizza tal y como había prometido a Margot y me subí a mi habitación a dormir.

domingo, 21 de noviembre de 2010

Elección Capítulo 18

-¿Y ahora que pasa? Por favor otra vez los celos no…
-Sí, lo que dice Margot, podía haber sido verdad, y todavía lo puede serlo.
-No lo será, ¿cuántas veces te tengo que repetir que yo solo te quiero a ti?
-No servirá de nada, todavía puedes sentir algo por él, llevas muy poco tiempo aquí, en cuanto lleves más…
-No Dylan, aunque me dejes, solo lo veo como un amigo, como nada más.
-Yo nunca te dejaría, lo sabes de sobra.
-¿Y porque tu no me crees y yo a ti si?
-Porque me parece imposible que sientas algo por mi.
-Pues créetelo.- dije cogiéndole de las manos para levantarle de la roca. No hubiera podido levantarle yo sola si él no hubiera puesto un poco de su parte. Se acercó a mí, él me rodeó la cintura, yo le rodeé el cuello con los brazos y le besé. Me daba igual que Margot posiblemente nos estuviera mirando, me daba igual que hubiese muchísima gente alrededor, sabía que él lo necesitaba.- ¿Necesitas más pruebas?
-A lo mejor no me vendrían mal unas cuantas más…- dijo volviéndome a besar. Nos apartamos cuando oímos la tos de Margot, tal y como había hecho Dylan aquella tarde cuando los pillamos.
-Vamos parejita, creo que va siendo hora de irnos a casa.
-Vale.
Habíamos llegado a casa cuando descubrí que Marcos todavía seguía hay, y no había cogido el camino de todos los días.
-¿Tú también te quedas Marcos?
-Claro que se queda, no me iba a quedar yo sola de vuestro sujetavelas.
-Lo comprendo. Imagino que ya conocerás la casa ¿no Dylan?
-Vine ayer.- yo me quedé sorprendida, vino ayer y nadie me había dicho nada.
-Tú lo sabías- acusé a Margot
-Claro, yo le dije que viniera hoy, pero el quiso venir ayer, por eso le dije a Olivia que te quedaras a dormir en su casa.
-¿Pero porque no me lo dijiste?
-Créeme, era mejor que le vieras hoy, ¿pero que más te da? Le ibas a ver igual.
-Hay lleva razón, el caso es que ahora estamos juntos, y lo demás no importa.
-Bueno pues os podéis instalar donde queráis para pasar la noche, hay 2 habitaciones que sobran, y son bastante grandes…- pero yo arrastré a Dylan escaleras arriba hasta mi habitación. Me tumbé en la cama y el se tumbó a mi lado.
-¿Bueno y que quieres que hagamos ahora?-me preguntó Dylan.
-Yo… me voy a cambiar, ahora vengo.
Fui al baño que había en mi habitación, me puse el pijama, me hice una coleta, como todas las noches y volví a tumbarme al lado de Dylan, apoyando la cabeza en su hombro.
-Estás muy guapa.
-No mientas- dije ligeramente ruborizada.
-Es la verdad, para mi estarás guapa aunque te vistas con un saco de patatas.- Entonces le abracé y me empecé a adormilar. No me había dado tiempo a dormirme cuando sentí que separaba uno de mis brazos, así que le volví a apretar a su alrededor con fuerza.
-No te vayas- dije en un susurro.
-Vale, pero duérmete.- y esta vez se quedó en la cama y os arropó a los dos con el edredón.
Caí en un profundo sueño, pero esta vez volví a soñar con aquello que me atormentaba algunas noches. Esta vez había más detalles, estábamos en mi casa, y estaba llena de adornos, ¿qué quería decir eso? Pero pronto el sueño se desvaneció y me desperté. Me empecé a mover buscando a Dylan, pero la cama estaba vacía. Abrí los ojos y allí estaba él, enfrente de la cama.
-Buenos días…
-Buenos días- dijo poniéndome una bandeja con el desayuno encima de la cama.
-¿Y esto?
-El desayuno. Lo he cocinado yo, Margot ya se comió su parte.
-Dylan no hace falta que te tomes tantas molestias…
-Tú te lo mereces, por eso lo hago.-dijo con una sonrisa.
Me comí todo el desayuno que estaba riquísimo, el mejor que comí en mi vida, y con la mejor compañía posible. El resto del fin de semana posiblemente fue el mejor de mi vida, pero al llegar el lunes volví a la realidad ,cada vez me quedaba menos tiempo. El despertador sonó a las 7, como siempre. Dylan estaba a mi lado, y le conseguí convencer para que no me volviera a llevar el desayuno a la cama, cuando había que madrugar era mejor que me levantara ha hacerlo yo. Me hice el desayuno, me vestí y me despedí de Dylan con un beso antes de irme.
-¿Entonces te gustó tu sorpresa?-dijo Margot de camino al instituto.
-Me encantó, enserio no se como podré agradecértelo algún día.
-No tienes porque agradecérmelo, era lo que necesitabas.
-Pero tú todavía sientes algo por él.
-Casi lo he olvidado, no te preocupes por ello.
En la primera clase del día, me tocó con Olivia, que notó mi cambio de actitud y enseguida me preguntó.
-¿Y esa felicidad tan repentina?
-¿De verdad que no lo sabes? Pensé que ya lo sabías.
-No, ¿qué pasa?
-Vino Dylan, arreglamos las cosas, y todo gracias a Margot.
-Así que se podría decir que estáis saliendo ¿no?
-Se podría decir.
-¿Llevaba o no llevaba razón?
-Sí, con todo. No cogía mis llamadas por celos de Alan, pero el tema ya está solucionado. Tampoco se lo quiero mencionar, no le sienta bien. Esta tarde quedamos y te le presento ¿vale?
-Vale.
Pero a la salida, como siempre, Alan me volvió a preguntar que si quedaba con él esa tarde. Pensé que si le decía la verdad, no se haría más ilusiones.
-¿Te vienes está tarde entonces?
-No, lo siento Alan, pero es que está Dylan aquí y solo se queda hasta el viernes, quiero aprovechar todo el tiempo que pueda estar con él.
-Dylan es…es tu…
-Mi novio, sí
-A vale, pues ya quedaremos.
-Vale.
-¿No has sido un poco dura con él?- dijo Olivia, que estuvo a mi lado durante toda la conversación.
-Merece saber lo que hay, no quiero que se haga ilusiones.
Esa tarde Olivia conoció a Dylan, no parecía que lo acabase de conocer hacía dos minutos, parecía que lo conociera de toda la vida, por la forma en la que hablaba con él. Para mi desgracia la semana pasó volando, y él viernes llego antes de lo esperado. Ese día estaba más decaída que el resto, por lo que los demás pudieron suponer el motivo. Por la tarde Margot y yo llevamos a Dylan al aeropuerto, y Margot me dejó para que me despidiera de él.
-No quiero que te vayas- le dije mientras le abrazaba.
-Yo tampoco quiero irme, pero es lo que tengo que hacer, encontraremos la forma de estar juntos ya verás.- dijo apretándome con fuerza.- Vendré a visitarte, te lo prometo.
-Yo también lo intentaré.- Nos apartamos un poco para poder mirarnos a los ojos, que era lo único que nos hacía falta para expresarlo todo. Me besó, no como si fuera una despedida, si no como un hasta luego.
-Te quiero- susurré.
-Y yo.
Entonces le dejé ir, mientras veía como desaparecía entre el bullicio, volví con Margot.

jueves, 18 de noviembre de 2010

Elección Capítulo 17

Me quedé allí de pie, paralizada, sin saber que hacer. Esto me parecía más irreal de lo que en realidad era mi vida. Me parecía prácticamente imposible que Dylan hubiera cogido un vuelo hasta aquí cuando no cogía mis llamadas, y lo más raro de todo, había venido a verme a mí, porque estaba en mi casa y Margot estaba fuera.
-¿Qué…que haces aquí?- le pregunté cuando reaccioné.
-Yo…Quería hablar contigo.
-Para eso no hacía falta que vinieras hasta Canadá, con que cogieras mis llamadas te valía.-dije mientras me iba de la puerta, pero Dylan rápidamente me cogió del brazo.
-Déjame explicarme por favor.-dijo mientras soltaba mi brazo. Entonces le miré a los ojos, y supe que por muchas cosas que me hiciera, le seguiría amando.-No soporto verte sufrir, y menos por mi. Siento mucho no haberte cogido las llamadas, no debí hacerlo, pero si me llamabas y descargaba mi furia contigo no podría perdonármelo, así que pensé que lo mejor era eso. Si no hubiera recibido la llamada…olvídalo, posiblemente al cabo de unos cuantos días te hubiera llamado y te hubiese dado esta explicación, pero tenía que venir.- evaluaba mi expresión en cada palabra que decía, que no podía ser otra que de sorpresa, iba a seguir, pero me adelanté.
-¿Qué llamada? y… ¿Por qué ahora si que tenias que venir?
-Tú hermana me llamó, me dijo como estabas y… que era por mí, cosa que me cuesta creer todavía. Dijo que si venía te alegraría, pero parece que se equivocaba con todo- dijo apenado. ¿Por quién iban a ser mis lágrimas si no eran por él? ¿Cómo no iba a alegrarme de que estuviera aquí? Todo el enfado que tuviera se quedó neutralizado al verle, tenía que hacérselo ver, yo tampoco podía verle sufrir.
-No se equivocaba. Le agradeceré a Margot eternamente que te haya traído, y si, fue por ti, todas mis lágrimas han sido por ti- dije medio llorando solo de ver que este momento era real.
-No llores más por favor, no soporto verte así- dijo cogiendo mi cara entre sus manos.- Y tenía que venir por ti, no podía decirte esto sin mirarte a la cara. No podía expresar todo lo que siento por ti en una simple llamada.
Y me besó como si sus palabras no sirvieran como prueba. Me besó de forma tierna y yo seguí el beso encantada. Al rato se separó dejándome respirar.
-Te quiero-susurró.
-Yo también.- dije apoyando mi cabeza en su pecho, disfrutando el momento- Te he echado tanto de menos… ¿Cuándo tienes que volver?
-En una semana, dejé a Emily sola, tampoco quiero alargar mucho su espera. Sabía que venía por ti.
-¿Todos lo sabíais menos yo?
-Era una sorpresa. Además fue idea de tu hermana.
-Solo me queda una pregunta- dije separándome un poco de él para mirarle a la cara-¿Por qué no cogías mis llamadas? Y no me vale con lo de que estuvieses cabreado.
-Para ser más exactos…estaba celoso de ese tal Alan.
-¿De Alan? Yo te quiero a ti, entre Alan y yo no hay nada, es solo un amigo.
-Pero él puede estar todo el tiempo que quiera contigo, yo no, y me frustraba aún más que pudieras sentir algo por él. Es egoísta, pero es lo que siento.
-En serio, no te preocupes, no quiero nada con él. Bueno, ¿podemos ir a buscar a mi hermana? Quería agradecerle que haya hecho esto por mí. ¿Sabes donde está?
-Sí, no creo que esté muy lejos, estoy seguro de que a estado escuchando, ¿tienes alguna idea de donde puede estar?
-No creo que nos esté escuchando, si hubiera querido escuchar se hubiera quedado dentro de la casa. Vamos al parque, puede que esté hay.
-Vale, vamos- dijo cogiéndome de la mano mientras salíamos por la puerta para ir al parque.
-----------------------------------------------------------------------
-¿Crees que lo habrán solucionado?-me preguntó Marcos.
-Seguro, no tardarán nada en venir aquí, es el primer sitio en el que buscará Allison.
-¿Entonces que hacemos aquí?
-Esperar a las noticias.
-Yo quería estar a solas contigo…
-Tenemos una semana entera, tú también te vas a quedar en mi casa ¿te parece bien?
-Perfecto.- Y se volvió a acercar como aquella vez que nuestro beso se vio interrumpido, pero esta vez nuestros labios se juntaron y nuestras lenguas se entrelazaron. A pesar de que mi cuerpo empezaba a dar signos de que había un enemigo cerca, un vampiro, los ignoré con todas mis fuerzas. Pero nuestro beso se vio interrumpido por una tos, ambos nos separamos y vimos a Dylan rodeando la cintura a Allison a unos cuantos metros de nosotros. Ambos nos sonrojamos tremendamente.
-Que oportuna hermanita…
-Solo quería agradecerte lo que has hecho lo mi.-dijo alejándose de Dylan y dándome un fuerte abrazo.
-Por lo que veo lo habéis arreglado.- la susurré al oído.
-Sí. Bueno… parejita os dejamos a solas.- dijo volviendo al lado de Dylan.
-No hace falta, ¿por que no nos vamos a tomar algo todos?
-Si pudieran tomar algo…- dijo refiriéndose a Dylan y Marcos.
-Pero Marcos el otro día se tomó un batido, estabas tu presente.- pero en vez de responder ella fue Dylan el que respondió.
-Podemos tomar alimentos humanos, solo que son un poco insípidos y no nos proporcionan lo mismo que la sangre. Una gran ventaja para pasar desapercibido.
-Hay estoy de acuerdo, si Margot no hubiera sido lo que es, dudo mucho que lo supiera.- dijo sonriéndome.
-Bueno pues entonces a la cafetería- dijo Allison.
--------------------------------------------------------------------------
De camino a la cafetería todos estábamos muy callados, posiblemente Margot y Marcos por haberlos pillado cuando se besaron y nosotros… bueno disfrutando de poder estar juntos por fin. Sería una semana muy corta, para mí al menos, Margot contaba con el consuelo de ver a Marcos todos los días y a todas horas, pero yo no podía hacer lo mismo con Dylan. Tenía claro que esta semana no me pondría a buscar trabajo, esta semana disfrutaría de cada instante.
Llegamos, tomamos asiento y el camarero nos tomó nota.
-¿Entonces ya está todo bien entre vosotros no?
-Sí, bueno, mejor que bien.- dije apoyando la cabeza en el hombro de Dylan.
-Os lo dije, a los dos, pero claro no quisisteis escucharme…De no ser por mí, los dos no estaríais juntos.
-Ya te di las gracias, te debo una.- dijo Dylan.
-Y yo.
-Allison, lo tenía que hacer, sabía lo mucho que os gustabais y probablemente hubieras acabado liada con Alan si no te demostraba que él también estaba enamorado de ti.-eso no le sentó muy bien a Dylan, que apretó el puño con fuerza. Me acerqué a él y le apreté ligeramente su puño cerrado intentando darle ánimos.
-Ya te he dicho que no quiero nada con él ¿vale? Relájate por favor.- le susurré.
-Me parece que no debería haber dicho nada…
-¿Tú crees?- pregunté a Margot fulminándola con la mirada. En ese momento parece ser que Dylan no podía más se levantó y salió a fuera. Suspiré y salí detrás de él, que se había apoyado en una roca, todavía con los puños cerrados.

lunes, 15 de noviembre de 2010

Elección Capítulo 16

Me desperté medio adormilada cuando sonó el despertador y bajé a tomarme el desayuno, todavía con la cara con lágrimas de la noche anterior. Margot había hecho tortitas, algo que no era muy común en ella, con sirope y zumo de naranja.
-Buenos días.
-Buenos días…
-¿Ya estás mejor?- esto explicaba lo de las tortitas.
-No, creo que lo mejor es olvidarle.- pensé que a Margot le gustaría la idea, así ella podría tener a Dylan para ella.
-No Allison, no hemos venido aquí para separarte de él. Os queréis y lo demás no importa, no tienes porque olvidarte de él.
-Margot el no me quiere, ya lo estás viendo.
-Si que te quiere, ¿necesitas pruebas para saberlo?
-Sí, las necesito.- dije cuando me sentaba en la mesa.
-Pronto las tendrás.
-¿Cómo?
-Ya lo verás, y cuando sepas que es así, nos vas a tener que dar la razón tanto a Olivia como a mí.
-Pues esperad sentadas.
-¿Y ese estado de ánimo a que viene?
-Lo sabes de sobra.-y me subí a mi habitación a cambiarme para ir al instituto.
Fui todo el camino del instituto en completo silencio, mientras Margot intentaba convencerme y darme ánimos, cosa que no servía de nada. Luego cuando llegamos a clase, Olivia se sumó a Margot. Olivia me dijo que quedara esta tarde con ella para despejarnos, y también invitó a Margot, al final tuve que acceder y así dejaron un poco el tema para el resto del día. A la hora de la comida Margot supo que no iba a cooperar por cambiar mi estado de ánimo al menos hoy y dejó el tema. Cuando terminé de comer me subí a mi habitación y conecté el ordenador para ver mi correo. Mientras cargaba cogí el móvil y lo puse en la mesa, guardando la esperanza de que llamara.
Tenía un nuevo correo de Zoe.
“Allison, no me gusta haber dejado las cosas así contigo antes de irte. Puede que me haya equivocado en lo que respecta a salir de la ciudad. Se que no te parezco una buena amiga por no contarte lo que pasa, pero es mejor que tengas la duda, antes que saberlo, por lo menos de momento. También que me equivocaba respecto a Dylan y a todo en general. Solo intentaba ser una buena amiga, pero creo que he fallado.
Zoe”
Hacía mucho tiempo que no tenía noticias de Zoe, era cierto que no dejamos las cosas bien al marcharme, pero ahora mostraba arrepentimiento, así que decidí contestar.
“No me has fallado como amiga, has hecho más de lo que cualquiera hubiera hecho por mí, me has dicho lo que pensabas, y lo que creías que era mejor. Con respecto a Dylan… no te preocupes, no hay nada entre nosotros, él no me quiere, y yo le olvidaré. Así que por mi todo arreglado, espero que podamos volver a ser amigas.
Allison”
El mensaje de Zoe en cierto modo me alegró algo del día, al parecer las cosas no iban tan mal. Entonces sonó el móvil, lo cogí esperanzada.
-¿Diga?
-¡Allison!
-¡Emily! ¿Qué tal te va?-dije ilusionada pese a no ser quien esperaba.
-Bien, Dylan dice que pronto podré ir a vivir otra vez con mi madre. Te llamo porque al parecer soy la única que no había tenido contacto contigo desde que te fuiste. Pero Dylan te habrá contado todo ¿no?-me alegraba de que me llamara, pero no pude evitar ponerme a llorar al pensar en Dylan.- ¿estás bien?
-Sí, no te preocupes. Me alegro de oírte Emily.
-Y yo Allison. ¿Te pasa algo con Dylan o es mi imaginación? Está muy raro, se le ve…triste.
-Él sabrá lo que le pasa, porque desde luego yo estoy todavía más confusa que tú.
-Y todavía más triste que él. Bueno te voy a tener que ir dejando, espero que te mejores, ya te llamaré. Adiós
-Adiós.
Cuando terminé de hablar con Emily me puse a leer para matar el rato hasta que fuera la hora de prepararme. Cuando llegó la hora, cogí mi bolso y baje haber si estaba Margot.
-¿Margot estás lista?
-¡Sí ya bajo!
Bajó corriendo poniéndose un pendiente mientras bajaba las escaleras.
-¿Desde cuándo te arreglas tanto?
-Pues… desde que quedo con Marcos.
-Tú…. ¿Tú y Marcos? Vas de vampiro en vampiro ¿no?
-Vale me gusta, estamos conociéndonos todavía. Se supone que le tendría que odiar a muerte por eso de la vieja leyenda, pero es que me es imposible.
-¿Entonces no quedas conmigo y con Olivia?
-Sí, he quedado más tarde con Marcos.
-Vale, vamos que llegamos tarde.
Estuvimos en la cafetería después de que Margot se marchara con Marcos y antes estuvimos dando una vuelta para conocer todavía mejor la ciudad. Me estuvieron hablando sobre Alan, por como todas las chicas estaban coladas por él y por como lo estaba desperdiciando yo. Yo a cambio les estuve hablando de Dylan, de todo lo que tenía que ver con él en general, conteniendo las lágrimas. Ellas se dieron cuenta y cambiaron de tema rápidamente.
-------------------------------------------------------------------
Salí corriendo de la cafetería hasta ir al parque donde había quedado con Marcos, que me estaba esperando en un banco.
-Siento llegar tarde.
-No pasa nada, ¿estabas con tu hermana?
-Sí, está hecha polvo, espero que mañana se puedan solucionar las cosas.
-¿Qué pasa mañana?
-Viene Dylan, pero tú no la digas nada, es una sorpresa.
-Dylan es el vampiro del que estabas enamorada ¿no?
-Sí, no te preocupes, le voy a olvidar.- vi como agachaba la cabeza, para ocultar algún sentimiento que no quería que supiera- Y estoy segura de que tú me vas a ayudar a olvidarle ¿verdad?
-¿Y si…si no le consigues olvidar?-le levanté la cabeza para poder mirarle a los ojos.
-Escúchame, le voy a olvidar, sí o sí, porque tú te lo mereces.- entonces me sonrió, nuestras caras estaban muy cerca y sus labios a punto de rozar los míos cuando sonó el móvil. Nos quedamos paralizados, pero reaccioné y lo cogí.
-¿Diga?
-Margot, estoy en el avión, llegaré en 1 hora allí.
-¿Pero porque no cogiste el vuelo de 1º hora de mañana como te dije?
-No quedaban vuelos de primera hora para mañana.
-Da igual, hasta mañana no la vas a ver.
-¿Por qué?
-Se va a quedar a dormir en casa de Olivia- dije sin pensar.
-Está bien.
-Bueno no te preocupes, ahora voy al aeropuerto, hasta luego.
-Hasta luego.-y colgué
-¿Era Dylan?
-Sí, tenemos que ir al aeropuerto.-me miró con cara de asombro cuando usé el plural- sí, tu te vienes, se supone que había quedado contigo ¿no?
-Sí- dijo sonriendo.
Llamé a Olivia para decirle que si Allison se podía quedar en su casa a dormir y fuimos hasta mi casa a por el coche, puesto que el aeropuerto no estaba precisamente cerca. Sabía que estaba preocupado porque yo todavía no había conseguido olvidar a Dylan, porque estuvo la mayor parte del trayecto callado. Cuando llegamos nos tocó esperar un rato hasta que vimos aparecer a Dylan con una maleta entre la multitud de gente que acababa de bajar del vuelo.
-Hola.- dijo primero mirándome a mi y luego a Marcos.
-Hola. Bueno os presento, Marcos este es Dylan y Dylan este es Marcos.
-Encantado.
-Igualmente. Imagino que sabrás que es.
-¿Cómo no lo voy a saber? Os reconozco en cuanto os huelo.
-Espero que no haya más licántropos aquí.
-Soy una única que yo sepa. Bueno vamos, te tengo que enseñar la casa antes de que venga Allison.-dije mientras íbamos hacia el coche y arrancaba.
-¿No se iba a quedar a dormir en casa de una amiga?
-Sí, pero mañana por la mañana vendrá a por las cosas del instituto imagino. De todos modos si quieres hablar con ella espérate a que venga.
-¿Crees que me escuchará?
-Seguro, veo como se pone el móvil cerca esperando a que la llames.
-La estoy haciendo sufrir y no me gusta que este así.
-Pues ya tenéis toda la semana para arreglarlo. A no ser que te quieras quedar más tiempo.
-No puedo, le dije a Emily que estaría una semana a lo mucho fuera.
-¿Sabe a lo que venias?
-Sí.
-Entonces lo entenderá.
-------------------------------------------------------------------
Olivia recibió una llamada cuando me iba hacia mi casa, y me paró.
-Allison, hoy te quedas a dormir en mi casa, y no discutas, no merece la pena vas ha hacerlo al fin y al cabo.
-No me voy a sentir mejor, ni me voy a olvidar de él porque vaya.
-Da igual, tú te vienes.
Así que al final me tocó pasar la noche en casa de Olivia que me dejó un pijama suyo. Al día siguiente fui a mi casa a por la mochila y me fui con Margot al instituto, que estaba de un humor excelente. El día fue muy tranquilo, Alan me preguntó que si nos íbamos con él y con Marcos a dar una vuelta, pero Margot dijo que ya habíamos quedado, a lo que Alan no se opuso. Ciertamente ella había quedado ya con Marcos, pero yo no, creo que supo que no quería quedar a solas con Alan.
Llegué a casa sola, puesto que Margot dijo que se iba a comer con Marcos, cosa que me extrañaba. Subí a mi habitación, y allí de pie mirando a la ventana estaba Dylan, que se giró cuando me oyó detenerme.

sábado, 13 de noviembre de 2010

Elección Capítulo 15

Quedé con Olivia para ir a casa de Alan en un parque que había cerca de la cafetería donde estuvimos el otro día, que al parecer quedaba cerca de su casa.
-Hola- me saludó mientras agitaba la mano enérgicamente.
-Hola…-dije todavía bastante desganada.
-¿Qué te pasa? ¿Otra vez Dylan?- No me podía creer lo amiga que me había hecho de Olivia en estos días, la contaba casi todo, quitando el hecho de lo que en realidad era, cosa que no creo que pudiera confiarla.
-Si, me llamó como hizo ayer, pero en cuanto mencioné que ayer salí con Margot, Alan y Marcos se puso seco y buscó una escusa para colgar.
-Entonces eso solo me indica que tu hermana llevaba razón con respecto a lo de sus sentimientos…
-¿Cómo?
-Piénsalo, es como un puzzle, le mencionas a Alan y te corta.
-No, seguro que no es eso.
-Todo se verá.
Llegamos a casa de Alan, llamamos al timbre y subimos.
-Hola chicas.
-Hola
-Bueno venir y así copiáis los apuntes.
Nos tumbamos en el suelo a copiar, puesto que el escritorio era bastante pequeño como para ponernos a copiar todos. Olivia y yo nos tumbamos una al lado de otra para poder ver bien los apuntes y Alan se puso enfrente. A los 10 minutos Olivia había terminado, y a mi me faltaba la mitad todavía.
-Bueno chicos yo me voy, mi madre me dijo que en cuanto terminase a casa. Mañana nos vemos.
Antes de que se marchara por la puerta la fulminé con la mirada, pero ella sonrió y se fue.
-Bueno parece que nos hemos quedado solos…-dijo Alan
-Tranquilo yo también me voy a ir, termino y ya.
No podía creer que Olivia me hubiera dejado sola, pero como no podía hacer nada me puse a copiar con mayor rapidez.
-Puedes quedarte el tiempo que quieras.
-Gracias- fue todo lo que pude decir, cada vez las suposiciones de Margot eran más ciertas.
-Bueno, me voy. Gracias por los apuntes.- dije cuando hube terminado dispuesta a salir por la puerta.
-Espera te acompaño, estas calles son un poco liosas hasta que te acostumbras.
Fuimos todo el camino en silencio hasta llegar a casa, Alan se fue y yo entré y llamé a Margot.
-¿Margot?
-Estoy aquí- la voz venía del piso de arriba, así que subí, tenía que contarle cosas.
-¿Qué tal con Alan?
-Olivia me dejó sola, ¿y tú con Marcos?
-Bien.
-¿Solo bien?
-Bueno… Él sabía lo que yo era, y yo lo que él era. Al olernos lo supimos y nos parecía ridículo seguirlo ocultando, esto implicó que supiera lo que eras tú. Prometió guardar el secreto, si nosotras guardábamos el suyo. No supone una amenaza, estamos a salvo. Bueno cambiando de tema…¿te volvió a llamar Dylan?
-Sí, pero no creo que lo vuelva ha hacer…
-¿Cómo que no? Me parece que me tienes que contar algo.
-Le conté que había quedado con Alan, se puso seco y se inventó una escusa para colgar.
-Está celoso…
-A esa conclusión también ha llegado Olivia. Pero no tiene motivos, no tengo nada con Alan.
-Pero tampoco lo tienes con él… Y Alan está más cerca de ti. Bueno, de todas formas si no te llama él, le llamas tú, seguro que te lo coge.
Al día siguiente Margot y Olivia me estuvieron dando ánimos, pero por la tarde él no llamaba, así que cogí el móvil y le llamé yo, pero no tuve respuesta.
-¿Con qué me lo iba a coger?
-Allison seguro que se le pasa, ya verás.
Pero yo ya no podía más, si de verdad sentía algo por mí como mínimo me cogería el móvil. Cansada, me puse a llorar y me metí en la cama para dormir, mientras veía como Margot salía de la habitación.
----------------------------------------------------------------------------
Había hecho bien intentando olvidar a Dylan, veía lo que Allison sufría por él. Pero había llegado el momento de dejar mis sentimientos hacía un lado para ayudarla como pudiera. Cogí mi móvil y lo puse en oculto, si a ella no se lo cogía menos a mí, pero bueno se podía intentar. Marqué el número y esperé hasta que alguien contestara.
-¿Diga?
-Dylan soy Margot, no me cuelgues si de verdad quieres a Allison.
-¿Qué quieres?
-Preguntarte porque no coges sus llamadas. Por tú culpa está llorando en su cama.- Pero o obtuve respuesta, así que seguí- Dylan se lo que sientes por ella, se te nota mucho, y a ella también.
-¿Cómo?
-Sí, si ella está llorando es por algo ¿no? No sabes lo que la costó alejarse de ti, todavía sigue lamentándose no poder estar allí contigo.
-Ella me ve solo como un amigo.
-Te equivocas. ¿Por eso no la llamas? ¿Por celos?
-Sí, no quería darla una mala contestación, y sabía que si me llamaba y me volvía ha hablar de ese chico lo haría. Lo mejor era no contestar.
-Así que es por Alan ¿no?
-Sí, ¿que sabes de él?
-Pues que Allison no quiere nada con él por ti, pero él si que lo quiere con ella, eso está claro, así que o te das prisa o si que vas a tener razones para estar celoso.
-¿Y qué puedo hacer?
-Venir, la darías una sorpresa, y así te podrías declarar.
-Pero…
-No te va a decir que no, y esta casa es muy grande, puedes quedarte el tiempo que quieras.
-¿Entonces cuando puedo ir?
-Que te parece…¿dentro de dos días?
-El viernes, bien, allí estaré.
-Coge el de madrugada, luego te recojo en el aeropuerto antes de que venga ella y así la damos la sorpresa.
-Está bien. Bueno Margot… Gracias.
-No hay de que, que conste que lo hago por ella.
-Lo se. Adiós.
-Adiós.-Y colgué.
Ahora si que me tenía que olvidar de él definitivamente, y lo iba a conseguir.

miércoles, 10 de noviembre de 2010

Elección Capítulo 14

-Vamos, que ni si quiera aquí estamos seguras ¿no?
-No, todavía no se nada de él, solo eso, pero ya no hay vuelta de hoja.
-Crees que Alan…
-No, Alan no es un vampiro, estoy segura.- No se porqué pero me alegró que no lo fuera. Algo absurdo teniendo en cuenta que el chico que me gustaba lo era.- Pero no te preocupes, averiguaremos lo que podamos.
Subí a mi habitación para irme a dormir, puesto que se había hecho tarde y mañana tenía instituto. No sabía la verdadera razón de la preocupación de Margot, Dylan también era vampiro y no tuvo esa reacción al descubrirlo. Además de la preocupación de Margot, en esos momentos me venía a la mente Alan, no podía creer que las suposiciones de Margot fueran ciertas, pero todo apuntaba a que así era. Me metí en la cama, demasiado cansada para seguir dándole vueltas, y me dormí enseguida.
A la mañana siguiente de camino al instituto, nos cruzamos con Olivia y sus amigas, que se unieron a nosotras.
-¡Hola chicas!
-Hola- respondimos Margot y yo a la vez.
-¿Qué tal os fue ayer?
-Bien, por la tarde salimos con Alan y Marcos a dar una vuelta.- Olivia puso cara de sorpresa, y supe que habría sido mejor no mencionar nada del tema…
-¿Así que Alan y Marcos eee? Lleváis un día aquí y ya estáis saliendo con los tíos más buenos de todo el instituto. Más de una querría estar en vuestro lugar.
-No estamos saliendo con nadie.
-Pues no lo parece.- Pero nuestra conversación se vio aplazada, porque sonó el timbre y fuimos a clase. Tuve la suerte de que me tocara Historia con Olivia, por lo que volvió a abordar el tema.
-Haber Allison, Alan no ha salido nunca con una chica el primer día de conocerla, reconoce que es raro al menos, siente algo por ti seguro.
-Que lo sienta él no significa que yo lo sienta, y por mi parte esta claro que no hay nada.
-¿Es por ese chico que me dijiste no? Se llamaba… Dylan ¿no?
-Sí…, Margot dice que él siente lo mismo, pero… no lo se, y al paso que voy no lo voy a saber.
-Si Margot lo dice es por algo.
-Solo porque me llamó y me dijo que me echaba de menos.
-Hay tienes la pista.
-De verdad que espero que lleves razón.
-Créeme, la llevo.- dijo con tanta convicción que me pareció totalmente real.
-Pero, en el caso de que la lleves, ¿Cómo lo voy a saber?-El profesor nos pilló hablando y me llamó la atención a mi.
-Señorita Allison, me puede decir que es lo que estábamos dando en esta página.
-No lo se.
-Bien, pues la señorita Olivia y usted van ha hacerme un resumen de esta página, y a ser posible me añaden los apuntes de clase.- En ese momento sonó el timbre, por lo que no pudo mandarnos nada más, y Olivia yo salimos disparadas de clase.
-Genial, 2 días aquí y ya tengo mi primer castigo. ¿De dónde narices voy a sacar yo los apuntes? Porque seguro que ni Elisabeth ni Nicole han atendido ¿no?
-Ni idea, tienen días que sí y días que no.
-Perfecto…
-Bueno, ¿por donde íbamos?
-Que como voy a saber si llevas razón.
-Fácil, declarándote.
-No puedo… Porque ¿y si dice que no?
-Lo superarás, si no siempre tienes a Alan…
-Alan es solo un amigo…- Y en ese momento, apareció Alan a nuestro lado, mientras Olivia me lanzaba una mirada de “te lo dije”.
-¿Hablabais de mi?- perfecto, como si no tuviera bastante.
-Sí, le preguntaba a Olivia que si tú podías tener los apuntes de Historia.
-Sí, ¿por qué no te vienes a mi casa esta tarde y lo copias?
-Vale, pero Olivia también tiene que copiarlo.
-Pues veniros las dos, además Olivia sabe donde vivo así te lleva. ¿A las 4 en mi casa?
-Vale. Bueno me voy, luego nos vemos.- Y Alan se fue hasta su clase, a mí ahora me tocaba Biología, que iba con Olivia y con Margot, así que tenía conversación para rato.
-Te lo dije…
-Espero que no me dejes sola.
-Haré lo que pueda…Voy a contárselo a tu hermana.
-¡No lo hagas!
-¡Hola Margot!- Dijo Olivia con alegría.
-Hola chicas.
-¿A que no sabes que a pasado?
-Que Allison ha quedado con Alan.
-Exacto, ¿cómo lo sabías?
-Intuición…
Después de esto, él día transcurrió tranquilo, salvo por las risitas de Olivia y Margot sobre esta tarde, lo que me hacía pensar que al final, acabaría sola con Alan. Sin embargo, de camino a casa, descubrí que Margot había quedado con Marcos.
-Solo es para averiguar cosas.
-Solo lo vas a saber cuando le digas lo que eres, y ambas sabemos que no lo vas ha hacer, así que hay algo más.
-¿Y lo tuyo con Alan?
-Yo no quiero nada con Alan, sabes que a mi el que me gusta es Dylan.
-¿Entonces?
-Estábamos hablando de Dylan Olivia y yo cuando el profesor nos pilla y nos manda hacer un resumen con apuntes, y como no tenemos los apuntes, se los pedí a Alan, que apareció en el pasillo cuando le dije a Olivia que él era solo un amigo. Fin de la historia.
-Te creo, simplemente porque se lo mucho que te gusta Dylan.
Ese mismo día, cuando terminamos de comer Dylan me volvió a llamar. Estuvimos un rato hablando, donde volví a preguntarle que tal por allí y el lo mismo a mi, pero la conversación acabó de manera brusca.
-¿Y al final ayer que tal te lo pasaste?
-Pues muy bien, Margot y yo fuimos con Marcos y Alan a dar una vuelta. Hoy ella ha quedado con Marcos y yo he quedado con Alan y Olivia para copiar unos apuntes.
-Me alegro de que te vaya bien- dijo con un tono seco, que me dejó desconcertada- Bueno Allison, te tengo que dejar, voy ha hacer el trabajo de ciencias para mañana. Adiós.
-Adiós…
Dylan nunca se ponía de esa forma conmigo, mi único consuelo era que mañana volviera a estar de buenas y llamara, porque si no lo iba ha hacer yo. Más tarde hablaría de esto con Margot y Olivia.

martes, 9 de noviembre de 2010

Elección Capítulo 13

-Sí, soy Allison. Encantada.
-¿Ya has conocido a alguien de por aquí?
-Si, esta mañana e conocido a Olivia, Elisabeth y Nicole. ¿Las conoces?
-Si, fuimos al colegio cuando éramos pequeños, somos muy buenos amigos.
¿Qué clase es la que te toca ahora? A lo mejor te puedo ayudar a encontrarla.
-Biología, la verdad es que en el mapa viene muy mal expresado.
-Has tenido suerte, también me toca a mi.
Seguimos caminando hasta llegar al aula de biología, donde también estaba Margot. Fui ha hablar con ella, y Alan me siguió.
-¿Qué tal te va por aquí?
-Pues mal, para que te voy a engañar. Salvo las chicas de esta mañana no e conocido a nadie más. Pero veo que tu no has perdido el tiempo…-dijo mirando hacia Alan.
-Es solo un amigo Margot-dije tan bajito que estuve segura que el no pudo escucharme, pero Margot si, porque sonrió.
-Bueno ahora me doy cuenta, no os he presentado. Alan, esta es Margot mi hermana, Margot, este es Alan.
-Encantado.
-Igualmente.
-Bueno, ya que estamos de presentaciones…-Llamó a dos chicos que estaban en el otro extremo de la clase hablando y ellos vinieron.- Bueno chicas, estos son Iker y Marcos. Chicos, estas son Allison y Margot, son nuevas.
-Un placer conoceros.
-Igualmente.
Él día se pasó mas deprisa de lo que nos imaginábamos. Nuestro primer día y ya teníamos amigos nuevos, algo que ni Margot ni yo, nos hubiéramos imaginado ni de lejos, al parecer no todo era tan malo como parecía. Cuando terminaron las clases, nos dimos las direcciones, los teléfonos y los e-mails, para poder contactar después de clases.
-Creo que ese Alan busca algo contigo…-Me dijo Margot de camino a nuestra nueva casa.
-Margot, lo acabo de conocer hoy, es imposible
-He hablado con Olivia, dice que nunca se porta así con ninguna chica que no sea ella y sus amigas, y porque las conoce desde pequeñas que si no… Vamos que se ve a leguas Allison.
-¿Ahora te las das de adivina?
-Yo solo te digo lo que veo, ya verás como esta tarde te llama, fijo.
-Ya verás como no- dije sacándola la lengua.
-Bueno ya se verá.
Llegamos a casa y comimos tranquilamente. Después nos pusimos ha hacer deberes, que no teníamos demasiados. Conecté el portátil, iba a enviar unos cuantos de correos. Mientras se cargaba, empezó a sonar el móvil. Empecé a pensar que sería Alan, y que tendría que darle la razón a Margot, pero en lugar de Alan, me llamaba ora persona.
-¿Diga?
-Allison, soy Dylan.
-¡Dylan! ¡Cuanto me alegro de oírte!, te hecho de menos.
-Y yo a ti.-esas palabras me brindaron una pequeña esperanza, a lo mejor él sentía lo mismo que yo.- Bueno, ¿que tal te ha ido el día?
-Pues muy bien, he hecho nuevos amigos.
-Me alegro de que te vaya tan bien.
-¿Y tú que tal por allí? ¿Qué tal va Emily?
-Bien, todos te echan mucho de menos, y Emily va acostumbrándose, de momento esta viviendo conmigo, pero dentro de poco estoy seguro de que podrá regresar con su madre, tendremos que inventarnos algo.
-Espero que sea pronto, su madre estaba destrozada…
-Bueno, te tengo que dejar, me voy a ir a cazar con Emily.
-Vale… Adiós.
Cuando colgó Margot subió arriba a mi habitación.
-¿Qué llevaba o no llevaba razón?
-No fue Alan.
-¿Entonces?- se quedó mirándome y parecía que mi cara de esperanza le había dado la respuesta.-Dylan… ¿no?
-Sí, dice que me hecha de menos.
-Y tú a él también
-Yo…-Pero no sabía que decir, y agradecí que Margot me cortara.
-Se os ve, Allison, tú estás coladita por él, y él por ti.
-No estoy tan segura de la última parte…
-¡Por Dios Allison! No se como puedes estar tan ciega, tuvisteis una cita.
-Sí, pero aún así, ¿cómo estas tan segura de que siente algo por mi?
-Porque…
-Margot dímelo
-Yo… también sentía algo por él en un principio, pero… sabía que él estaba enamorado de ti en realidad, y no podía hacer nada por evitarlo. Veía como te miraba… y bueno, decidí que lo mejor era olvidarme de él.
-Eso explica lo de la foto… ¿por eso nos vinimos aquí? ¿Para que le olvidaras?
-No Allison, ya sabes que estamos aquí por nuestro bien.
-Pero esto también te ayuda a olvidarte de Dylan… Que tú te quieras olvidar de él no significa que yo me tenga que olvidar.
-Y no te estoy pidiendo eso, simplemente venir aquí ha sido por prevención.
Pero la charla se vio interrumpida, porque volvió a sonar el móvil, y lo cogí esperanzada de que fuera Dylan de nuevo, y lo que había dicho Margot fuese real.
-¿Sí?
-Hola Allison, soy Alan, me preguntaba si querríais tu hermana y tu dar una vuelta conmigo y con Marcos.- Margot seguramente lo había oído todo, así que la miré esperando respuesta, y asintió lentamente con la cabeza.
-Vale, ¿a qué hora y dónde?
-¿Te parece bien a las… 6 en el bosque que hay enfrente de tu casa?
-Vale, allí estaremos.- colgué y Margot me miró de forma inquisitiva.
-¿Y bien?- preguntó
-Vale, te concedo lo de la llamada, pero de momento te tendrá que bastar con eso.
-Pronto me reconocerás el resto.
-Todo se verá, ahora prepárate, tenemos 20 minutos.
Estuvimos preparadas en menos tiempo del previsto, y bajamos al bosque a esperarlos. A los 2 minutos llegaron a nuestro lado.
-Perdón por el retraso chicas.-dijo Alan.
-Hemos sido nosotras que hemos llegado antes, no os preocupéis.
-Bueno pues ya estamos todos, ¿que tal si vamos a la cafetería?
-Vale, vosotros guiáis, que no conocemos todavía esto.
-No hay problema.
Fuimos los 4 juntos caminando hasta la cafetería. Cuando llegamos, Alan se sentó a mi lado, por lo que Margot se sentó al lado de Marcos, que no paraba de mirarla. Estuvimos hablando mientras, y cuando terminamos, nos llevaron a dar una vuelta por lo que sería nuestra nueva ciudad. Se hizo tarde y Alan insistió en llevarnos a nuestra casa. Yo iba a subir a mi habitación, pero vi a Margot parada delante de la puerta.
-¿Margot te pasa algo?
-Ese chico, Marcos… Es un vampiro Allison.

LinkWithin

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...